Un cadáver en el río por San Juan y los dos vapores Aznalfarache 1893-1918

 

Sevilla 3.- Flotando en las aguas del Guadalquivir, y cerca del pueblo de San Juan de Aznalfarache, se ha encontrado un cadáver.

Como aún falta uno de los que perecieron en la catástrofe del 8 de noviembre, creen algunos que sea este, si bien es muy problemático, por la gran distancia que media entre el lugar de la ocurrencia y el sitio en el que se ha hallado.

Artículo encontrado en:

“El Correo”. Viernes, 4 de diciembre de 1896. Madrid.

Aprovechamos esta noticia para tratar el tema de los dos barcos que llevaron el nombre “Aznalfarache”:

La noticia anteriormente transcrita tiene que ver con un pequeño vapor para el transporte lúdico de personas y también de pasajeros, formando parte de una línea regular, por el Guadalquivir, incluyendo nuestra localidad, llamado “Aznalfarache”, por su propietaria, la Compañía Sevilla de Navegación, que lo compró en Sunderland (Inglaterra). Curiosamente, cuando el primer vapor fabricado en España, se hizo en 1817 ("Diario de Barcelona", 29 de junio), en la ciudad hispalense, una compañía sevillana fue a comprar aquel barco a los ingleses.

Aquel nuevo vapor, por la primera noticia que tenemos del mismo, según “El Noticiero Sevillano, diario independiente de noticias, avisos y anuncios”, del lunes 30 de octubre de 1893, se hallaba en el Puerto de Bonanza (Sanlúcar de Barrameda, Cádiz), cumpliendo una cuarentena de tres días, al proceder de un país extranjero.

En la madrugada del 8 de noviembre de 1986, a la altura del denominado como Callejón de la Mata, en el tramo del río Guadalquivir que cruza la capital hispalense, según relata uno de los dos supervivientes, D. Juan Fe, un grupo de amigos que había contratado los servicios del vaporcito Aznalfarache, para cazar patos en Doñana, después de cenar y tras chirigotas, chistes y cuentos, mientras el barco seguía amarrado, se fueron a acostar en sus respectivos camarotes. Por temor al frío y mientras la mayoría de ellos estaban ya durmiendo profundamente, sobre las cinco de la mañana, y al estar despierto el pasajero superviviente, por pelearse con su compañero por la manta, se movió el barco bruscamente por un choque violentísimo, seguido de un atronador ruido de maderos, tableros y cristales que, al desprenderse, crujían de un modo espantoso.

El vapor Torre del Oro, mucho mayor que el de los afectados, avanzaba por el río, no fueron capaces de distinguir al pequeño barco amarrado y se les echaron encima. La confusión de los pasajeros del Aznalfarache fue tan espantosa como terrible y sólo se oían voces solicitando socorro. Los tripulantes del Torre del Oro echaron enseguida su bote y cabos al agua para el rescate, pero el vaporcito se hundió rápido, pudiendo solo auxiliar al capitán, el Sr. Martínez y al narrador de esta terrible experiencia, D. Juan Fe. 22 hombres, entre pasajeros y tripulantes, fallecieron por este choque terrible, una catástrofe que consternó a todo el vecindario de Sevilla, según se narra en “La Unión Católica” y otros muchos periódicos por toda España en el día 9 y los sucesivos, como “El Defensor de Granada” (día 10).

Grabado de ambos barcos, que permite comparar su gran diferencia de tamaño.

Tras este horrible suceso y extrañamente a lo que dictan las supersticiones marítimas, en 1899, encontramos ya datos de un segundo barco, esta vez, un vapor más grande, con capacidad para transportar mercancías, además de sus tripulantes, también llamado Aznalfarache. En “Gaceta de Madrid” (antiguo nombre del “Boletín Oficial del Estado”), del año indicado y hasta 1908, pasando por el anuncio publicado en 1916 y que incluye el nombre de este barco, aparece que transportaba alimentos como el maíz, el trigo, la cebada y los cereales, cargándolos y descargándolos tanto en Sevilla, como en ciudades costeras españolas, como Barcelona y Palamós, e incluso en el extranjero, como en Marsella.

Anuncio aparecido en prensa, del año 1916, haciendo mención de este barco a vapor, además del ya mencionado Torre del Oro.

Y llegamos al artículo en la publicación “La Publicidad”, el viernes 6 de diciembre de 1918, que nos refiere que el día anterior se había recibido en las redacciones de los periódicos la noticia del naufragio del vapor español Aznalfarache que, debido a un fuerte temporal, encalló el miércoles a ocho kilómetros al norte de la playa de la localidad Nazaré, en la costa portuguesa. Los barcos que trataron de socorrerlo encontraron a quince tripulantes muertos y a otros doce vivos, quedando el barco completamente destrozado.

Se indica que este vapor también pertenecía a la Compañía Sevillana de Navegación y desplazaba mil toneladas de carbón, de Gijón a Barcelona, con una tripulación total de 27 hombres. Según explica el artículo, este segundo barco de vapor, nombrado como “Aznalfarache”, tenía anteriormente el nombre “Ottawa”, y había sido construido también en Sunderland en 1873 (curiosamente, era más antiguo que el pequeño que naufragó en el Guadalquivir), siendo matriculado en España veinte años después (coincidiendo esta fecha con la compra del otro).

Este segundo barco medía 71 metros de eslora, 9 de manga y 6 de puntal. Su tonelaje de 1161 toneladas brutas y 777 netas.

El segundo Aznalfarache atracado en un puerto.

El propio artículo de “La Publicidad” indica que era muy conocido en el puerto de su ciudad de edición, Barcelona, por su tráfico regular entre Sevilla y Marsella, con escala en todos los puertos intermedios. Anecdóticamente, la noticia también indica que el barco de vapor Torre del Oro aún continuaba en activo.

Y estos son algunos de los detalles de la historia de los dos barcos llamados “Aznalfarache”, dos vapores distintos, atribuidos a la misma compañía naviera sevillana y ambos con final catastrófico.

Herido al caer del muelle de San Juan de Aznalfarache 1896

Dibujo aparecido en "La Ilustración Ibérica", en 1894. Creemos que hay un error en la denominación y que, más que un puente, como se indica en la leyenda, se trataría de un muelle, quizá el de la fábrica de loza o incluso uno ya existente en la actual desembocadura de la calle Betis (antes, Guadalquivir).

Esta tarde, se encontraba pescando en el muelle de San Juan de Aznalfarache, un individuo llamado Joaquín Rodríguez García, el cual, en uno de los movimientos que hizo, tuvo la mala suerte de caer al agua, dándose con unas estacas y causándose las siguientes heridas: una, en la región mentoniana, de bastante extensión, con pérdida de sustancias y quedándose el hueso al descubierto; otra en la región interna del labio superior; y otra, en la externa del mismo.

Conducido a la casa de socorro de la calle Pureza, fue curado y trasladado a su domicilio.

Artículo publicado en:

“El Noticiero Sevillano, diario independiente de noticias, avisos y anuncios”. Domingo, 18 de octubre de 1896. Sevilla.

Aparece un cadáver en el Guadalquivir a su paso por San Juan de Aznalfarache 1896

Sección de cuadro de Manuel Barrón de 1856, con parte de las edificaciones de nuestra localidad y el Guadalquivir.

Por los agentes de la autoridad, tuvo conocimiento el juzgado de guardia de que, próximo a San Juan de Aznalfarache, en el sitio denominado Venta de las Flores y sus aguas del Guadalquivir, se encontraba el cadáver de un joven.

Personado en el lugar indicado, se identificó el cadáver, resultando ser el de Manuel Jaén Ortiz, de 17 años de edad, natural de Sevilla y que vivía en la calle Pagés del Corro, núm. 65.

De las instrucciones practicadas, parece resultar que el citado Ortiz se encontraba bañándose en unión de otros y fue empujado por uno de estos, ignorándose quién.

A las diez de la noche, llegó el carro fúnebre, que recogió el cadáver, trasladándolo al depósito anatómico.

Este artículo aparece publicado en:

“El Noticiero Sevillano, diario independiente de noticias, avisos y anuncios”. Viernes, 31 de julio de 1896. Sevilla.

NOTA DE LA ADMINISTRACIÓN DEL BLOG: La denominada como Venta de las Flores (que ciertamente podría hacer referencia a la fábrica de perfumes que tenía sembrada gran parte de la ribera del término municipal con plantas entre 1840 y 1869), desconocemos si es un antecedente de la Venta Cortés o incluso es un error del periodista que escuchó mal el nombre. Hasta el momento presente, y salvo este artículo, no hemos encontrado más mención a tal venta así denominada, de la que lo único que queda claro es que estaba junto al río, al igual que la Venta Cortés de principios del siglo XX.

La Guardia Civil detiene a un agresor en San Juan de Aznalfarache 1896

Dos hombres con uniformes caminan entre olivos (imagen creada con inteligencia artificial).

En San Juan de Aznalfarache, ha sido preso, por la Guardia Civil, José de la Granja que, con una aguja-calicata, causó dos heridas en el pecho a Gregorio Gómez.

Texto publicado en:

“El Noticiero Sevillano, diario independiente de noticias, avisos y anuncios”. Viernes, 18 de julio de 1896. Sevilla.

Incendio en una casa en San Juan de Aznalfarache 1896

Única imagen que conocemos de una calle de San Juan de Aznalfarache en el siglo XIX, publicado en "La Ilustración Ibérica", en mayo de 1894.

Ayer ocurrió, en el inmediato pueblo de San Juan de Aznalfarache, un incendio que no adquirió proporciones, merced al oportuno auxilio que prestaron los vecinos del pueblo.

En una casa, propiedad de D. Narciso Castro, y que tiene alquilada a una familia extranjera, se inició aquel, en ocasión en que la familia que la habita se encontraba en esta capital.

Algunos vecinos, que se apercibieron de las llamas que salían de la casa, avisaron a las autoridades, las que dispusieron que se descerrajase la puerta de entrada.

El incendio había comenzado por la cocina y se propagó a una sala inmediata, donde tenía establecido el escritorio el dueño.

Después de tres horas de trabajo, se consiguió dominar el incendio. Las pérdidas causadas no son de consideración. No hubo, por fortuna, incidente que lamentar, aunque algunos de los vecinos, que trabajaban para extinguir el incendio, estuvieron en evidente peligro.

Artículo publicado en:

“El Noticiero Sevillano, diario independiente de noticias, avisos y anuncios”. Sábado, 4 de abril de 1896. Sevilla. 

Marinero ahogado en el río por San Juan de Aznalfarache 1895

Dibujo ilustrativo de la Fábrica de Loza, en San Juan de Aznalfarache, realizado para el "Periódico Universal", en 1856.

El Guadalquivir arrojó, junto a Tablada, el cadáver de un joven de 23 años.

De las averiguaciones practicadas, resulta ser el de un tripulante de un vapor inglés, que llegó hace poco a Sevilla, con cargamento de tierra para la fabricación de loza fina en San Juan de Aznalfarache.

Parece que el joven marinero estaba bañándose, cuando tuvo la desgracia de sumergirse.

Texto publicado en los siguientes periódicos:

“La Iberia”. 28 de junio de 1895. Madrid.

“La Justicia”. 28 de junio de 1895. Madrid.

Taponero herido tras una pelea en San Juan de Aznalfarache 1895

Imagen creada con inteligencia artificial.

Anoche cuestionaron, en el inmediato pueblo de San Juan de Aznalfarache, varios sujetos, resultando uno de ellos, llamado Alfredo Tomeno Fernández, de oficio taponero, que vive en esta capital, calle Santiago núm. 44, con dos heridas incisas, una de ellas, de 21 centímetros de longitud en la espalda y otra pequeña, en la muñeca izquierda.

Fue curado en la casa de socorro de la calle del Cardenal, dándose parte al señor juez del distrito de San Román.

Texto publicado en:

“El Noticiero Sevillano, diario independiente de noticias, avisos y anuncios”. Jueves, 27 de junio de 1895. Sevilla. 

Un cadáver en el río por San Juan y los dos vapores Aznalfarache 1893-1918

  Sevilla 3.- Flotando en las aguas del Guadalquivir, y cerca del pueblo de San Juan de Aznalfarache , se ha encontrado un cadáver . Com...